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“Whatever happens, friends will be friends” (“Pase lo que pase, seguiremos siendo amigos”) es el mensaje con el que Islas Canarias acude a la 40.ª edición de la World Travel Market (WTM) de Londres, cuyo objetivo es poner en valor la histórica vinculación entre el Reino Unido y las Islas, además de resaltar la destacada posición que tiene el archipiélago como destino turístico en nuestro principal mercado.

El escenario actual, determinado por la reciente quiebra del turoperador británico Thomas Cook y la nueva prórroga del Brexit, obligan a estar presentes con una campaña que, además de desarrollarse en el marco de esta cita mundial, se llevará a cabo durante noviembre y diciembre en medios digitales para recordar con este guiño a los británicos que siempre hemos sido su destino favorito. Pese a las incertidumbres, el hecho de que las Islas siguen estando entre las prioridades vacacionales de los británicos lo confirma la cifra con que Canarias podría cerrar 2019, la cual está cerca de los cinco millones de turistas de esta nacionalidad que visitaron el archipiélago el pasado año.

La WTM, que abrió sus puertas hoy lunes 4 de noviembre, es sin duda una gran oportunidad para que Canarias continúe muy presente en los planes vacacionales de los europeos y, en particular, de los británicos. Esta feria mundial reunirá hasta el 6 de noviembre en Londres cerca de 2.300 destinos turísticos, más de 9.000 expositores y unos 90.000 asistentes.

350 profesionales del archipiélago en un atractivo pabellón de 800 m²

Más de 350 profesionales procedentes de todas las Islas dispondrán del pabellón que Promotur Turismo de Canarias lleva a este importante evento, una instalación de 800 metros cuadrados cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) que albergará los numerosos encuentros profesionales previstos con representantes de la industria turística británica y mundial en una intensa agenda de trabajo.

Al objeto de transmitir los valores de la marca Islas Canarias, se han creado contenidos audiovisuales específicos que invitan a la contemplación de imágenes y sonidos envolventes que representan los destinos insulares de manera atractiva, incluso modulando y adaptando la velocidad de las imágenes con diferentes ambientes cromáticos y efectos de iluminación. De esta manera, el espacio del stand se ha planteado como un recurso más a la hora de promocionar el archipiélago, con un potencial de comunicación que se apoya en elementos innovadores como una gran cubierta flotante en forma de ola, 18 focos robotizados que crean efectos luminosos para reflejar los colores del océano, la vegetación y las tierras de origen volcánico, incluyendo planos aéreos que se contraponen con imágenes detalladas, aportando novedosos puntos de vista.

Además, en la zona pública se integran mostradores de información, un espacio dedicado a zumería, otro para la degustación y cata de productos típicos, una gran pantalla de 14 metros cuadrados y una zona de reuniones profesionales con capacidad para 120 personas. Se ha destinado también un área de boxes para albergar hasta 32 empresas, siete despachos de nueve metros cuadrados para cada isla, una oficina de prensa, guardarropa y salas de reuniones adicionales.

Sostenibilidad, reciclaje y reutilización

El equipamiento del stand es reutilizable y adaptable para diferentes exposiciones. Desde el momento de la planificación de los diferentes elementos ya se pensó en la reutilización de casi todos sus componentes y se realizó un plan de reciclado de los materiales desechables. De hecho, cuentan con las certificaciones ambientales que exige la normativa europea. Un ejemplo son los elementos procedentes de la madera, que tienen la etiqueta que garantiza que en su transformación han sido utilizados materiales ecosostenibles o reciclados, y en ningún caso se han empleado maderas naturales o procedentes de árboles exóticos.

Por su parte, para los tratamientos de acabados, como pinturas y barnices, se han aplicado productos con etiqueta ecológica europea. La señalización del pabellón también se ha limitado a lo mínimo, sustituyéndola por pantallas led reutilizables que sirven como soporte para identificar los espacios. Donde ha sido inevitable la impresión, se ha realizado con tintas ecológicas de origen vegetal y ecosolventes.

Lo mismo ocurre con la tecnología empleada en los equipos electrónicos y de alumbrado, ya que apuestan por el menor consumo de potencia eléctrica a través de luces led, consiguiendo mayor luminosidad con menos vatios. En este sentido, comparando la instalación de Canarias en 2015, se ha conseguido reducir el consumo energético en 100.000 vatios aun existiendo este año un 130 % más de audiovisuales y luminotecnia.

El stand incorpora un punto limpio con recipientes para depositar los desechos, con separación de materiales para su posterior reciclado; y las degustaciones, tanto en la zumería como en el área de catas, se servirán en materiales reciclados.