Desde ayer, 22 de junio, y hasta el próximo domingo 26, la marca turística Islas Canarias está presente en la localidad alemana de Pulheim, situada en las afueras de la ciudad de Colonia, para mostrar al público asistente al BMW International Open 2016 las excelentes condiciones que reúne el archipiélago para la práctica del golf.
Organizada por Promotur Turismo de Canarias, en esta acción promocional participan también los organismos de promoción de Gran Canaria, Lanzarote, Tenerife y Fuerteventura, además de representantes de campos de golf y hoteles de las Islas. Todos en una misma carpa decorada con atractivas imágenes de los campos de golf y genéricas de las Islas.
Durante los cinco días de torneo se prevé la asistencia de 65.000 personas, un público exigente ante el que Islas Canarias podrá promocionarse como destino ideal de golf, gracias al excelente clima del que disfruta el archipiélago durante todo el año, los modernos y variados campos de golf, dotados de todos los servicios que requiere el jugador, la completa oferta hotelera y la amplia variedad de playas donde elegir.
El 15 % de los turistas que vienen al archipiélago para jugar al golf proceden de Alemania, uno de los mercados clave incluido en el grupo de mercados objetivo que establece el Plan de Marketing 2016 de la marca turística Islas Canarias. Este porcentaje de turistas alemanes, cuyo motivo principal es jugar al golf, se traduce en que el año pasado nos visitaron 20.787 golfistas de ese país de un total de 138.716. Siguiendo la tendencia creciente general de la llegada de turistas de golf al archipiélago, el incremento de golfistas alemanes también ha sido muy importante si comparamos estos dos últimos años. Así, mientras en 2014 llegaron 17.842 turistas de este segmento, en 2015 ascendió a 20.787, lo cual supone un incremento del 16,5%.
En general, el turista de golf que visita las Islas se caracteriza por un perfil de alto poder adquisitivo, que gasta un 33% más que otros perfiles, se hospeda en su mayoría (aproximadamente en un 58%) en hoteles de cuatro y cinco estrellas, demandan la alta gastronomía, desean jugar en campos de golf de distinta tipología durante su estancia en las Islas, y disfrutan de las playas y del clima.